19.- Juan Ramón Jiménez, soneto y otras poesías


   

RETORNO FUGAZ

¿Cómo era, Dios mío, ¿Cómo era? 

—¡Oh corazón falaz, mente indecisa! — 

¿Era como el pasaje de la brisa? 

¿Como la huida de la primavera?

 

Tan leve, tan voluble, tan ligera 

cual estival villano... ¡Sí! Imprecisa 

como sonrisa que se pierde en risa... 

¡Vana en el aire, igual que una bandera! 


¡Bandera, sonreír, vilano, alada 

primavera de junio, brisa pura... 

¡Qué loco fue tu carnaval, qué triste! 


Todo tu cambiar trocóse en nada 

—¡memoria, ciega abeja de amargura! — 

¡No sé cómo eras, ¡yo qué sé qué fuiste!


Juan Ramón Jiménez (1881-1958)


A MI ALMA

Siempre tienes la rama preparada

para la rosa justa; andas alerta

siempre, el oído cálido en la puerta

de tu cuerpo, a la flecha inesperada. . . .


Una onda no pasa de la nada,

que no se lleve de tu sombra abierta

la luz mejor. De noche, estás despierta

en tu estrella, a la vida desvelada. .

Signo indeleble pones en las cosas.


Luego, tornada gloria de las cumbres,

revivirás en todo lo que sellas. .


Tu rosa será norma de las rosas;

tu oír, de la armonía; de las lumbres

tu pensar; tu velar, de las estrellas.

***************

ES MI ALMA

No sois vosotras, ricas aguas
de oro, las que corréis
por el helecho, es mi alma.

No sois vosotras, frescas alas 
libres, las que os abrís 
al iris verde, es mi alma. 

No sois vosotras, dulces ramas 
rojas las que os mecéis 
al viento lento, es mi alma.

No sois vosotras, claras, altas
voces las que os pasáis
del sol que cae, es mi alma.

JUAN RAMÓN JIMÉNEZ 
🧚‍♀️



Comentarios

  1. El alma también presiente y tiene nostalgias sutiles e imprecisas de cierto encuentro con otra alma.

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